A medida que avanzan las penosas labores de rescate realizadas por los mismo vecinos en las construcciones colapsadas, ascienden a 1,300 los muertos, a 5,700 heridos y aún son muchos más numerosos los desplazados tras el terremoto de 7,2 grados del 14 de agosto.
Se calcula que las viviendas destruidas son miles, lo que sume al país en una crisis humanitaria de grandes proporciones cuando aún no se recuperaba del trágico sismo que causó más de 300.000 muertes en el año 2010, informa la agencia AP del 16 de agosto.
La Oficina de Protección Civil de Haití comunicó que más de 7.000 casas fueron destruidas y hay casi 5.000 más averiadas. También se vieron afectados hospitales, escuelas, oficinas e iglesias.
Mientras se preparan los envíos de ayuda humanitaria internacional que mitiguen la tragedia, la desesperación de los sobrevivientes hace que arriesguen sus vidas también tratando de rescatar a los familiares enterrados en los escombros.
Muchos centros de asistencia hospitalaria quedaron averiados seriamente, y los heridos que colman los que permanecen en pie superan la capacidad de atención disponible.
“Muchos de los pacientes tienen heridas abiertas y han estado expuestos a elementos no muy limpios”, relató el doctor Inobert Pierre, pediatra de la organización sin ánimo de lucro Health Equity International.
Pierre visitó dos hospitales en Les Cayes: uno con unos 200 pacientes y el otro con unos 90. Y agregó: “Prevemos muchas infecciones”.
Por su parte, el primer ministro Ariel Henry declaró el estado de emergencia durante un mes para todo el país e informó sobre el envío de ayuda a los lugares afectados.
“Saludamos la dignidad, el esfuerzo de resiliencia de los damnificados y su capacidad de volver a empezar. De mis observaciones, deduzco que los haitianos quieren vivir y progresar”, señaló Henry.
“Unámonos para ofrecer a estas personas un entorno de vida propicio para el desarrollo”, añadió.
Asimismo, la administradora de la USAID, Samantha Power, supervisará los esfuerzos de ayuda humanitaria aportados por la administración Biden.
“He autorizado el despliegue de la USAID. Un equipo de asistencia en casos de desastre irá para liderar nuestra respuesta al terremoto de hoy en Haití. También estamos coordinando con el gobierno haitiano, a través de la Embajada en Haití y otros” tuiteó Power.
Y agregó: “Trabajamos rápidamente para ayudar a los haitianos y salvar vidas. Estados Unidos ayudará a Haití”.
Power anunció el domingo que la USAID iba a enviar un equipo de búsqueda y rescate desde Virginia a petición del gobierno de Haití.
Estará compuesto por 65 personas, quienes llevarán herramientas especializadas y suministros médicos para ayudar en la respuesta al desastre, dijo Power en Twitter.
El epicentro se ubicó al sur del país, a unos 125 kilómetros al oeste de la capital, Puerto Príncipe, y las réplicas se siguieron presentando al día siguiente. Una de las localidades más afectadas fue la costera de Les Cayes.
Peor aún, el Centro Nacional de Huracanes de EE. UU. prevé que la depresión tropical Grace, llegue a Haití el lunes 16 durante la noche. Aunque no tendría la fuerza de una tormenta tropical, podría traer fuertes lluvias, inundaciones y deslizamientos de tierra.
Al desatre causado por el terremoto se suman los daños causados por la pandemia del Covid o virus PCCh (Partido Comunista de China), el asesinato del presidente, Jovenel Moisey, una ola de violencia de las pandillas.
Haití cuenta con 11 millones de habitantes y recién recibió su primer lote de vacunas contra el coronavirus donadas por Estados Unidos el mes pasado.
(Bles mundo)