Siguen apareciendo casos de efectos secundarios e incluso de muertes en personas a las que se les acababa de administrar la vacuna contra el coronavirus. En este caso el fallecimiento ha ocurrido en Castellón. Según informa el diario ‘Las Provincias‘, un anciano que vivía en la residencia Viver de las Aguas, ubicada en el municipio castellonense de Viver, ha fallecido CON coronavirus después de que el pasado día 29 de diciembre se le hubiera administrado la primera dosis de la vacuna CONTRA el coronavirus de Pfizer, según añade el mismo digital, al parecer se ha detectado un rebrote en la residencia.

Pero, ¿se han dado ustedes cuenta del gran detalle que tiene el titular con el que se informa de esta noticia? En primer lugar, llama la atención que alguien vacunado pueda volver a contraer la enfermedad, lo cual nos lleva a preguntarnos: ¿para qué sirve exactamente la vacuna? Pero el gran detalle del titular es la preposición. ¿Observan qué gran diferencia hay entre morir CON coronavirus que morir POR coronavirus? ¿Se dan cuenta de la enorme cantidad de gente que no se dará cuenta de esa pequeño, pero grandísimo detalle?

En primer lugar, llama la atención que este pobre hombre se haya muerto, como ha sucedido ya en bastantes casos, justo después de vacunarse. En segundo lugar, lo que llama la atención es que tenga el virus después de vacunarse contra él. Pero en tercer lugar, y es lo que más nos llama la atención, es que este pobre hombre, que en paz descanse, no ha muerto por coronavirus, ha muerto “con” coronavirus.

Esto es como si alguien falleciera en un accidente de tráfico, se le realizara la autopsia y se le detectara, por ejemplo, algún tipo de tumor cancerígeno. El hombre no habría muerto por el tumor, habría muerto por un accidente de tráfico y con un tumor, tumor que no le ha causado la muerte. Observen esos pequeños detalles porque hasta a los más grandes y manipuladores medios se les escapa en alguna ocasión, quedando demostrado su intento de manipulación.

(El Diestro)